Ante todo una breve presentación para todos aquellos que no me conocen lo suficiente. Nací en Caracas el 18 de Noviembre de 1.964, en el Hospital Clínico Universitario, haciendo padres por primera vez a Carlos Guillermo Porras Ramìrez y a su para ese entonces esposa Rosalba Ramìrez, un matrimonio "normal" de esos que terminal en divorcio dejando a mi hermana Roxana Elizabeth Porras Ramìrez, recién nacida y a mi de 11 años a la suerte de improvisaciones de ese par de recién separados padres. Tuve una infancia y pubertad muy ligado a mis abuelas, al principio la materna y en mis años juveniles muy cercano a mis abuelos paternos, sobre todo a mi Abuela Margarita, quien dicho sea de paso, vive aún en mis pensamientos y oraciones, por haber sido mi guía y ejemplo, (lastima que no le hice suficiente caso antes); he transitado mi vida dando golpes de un lado a otro del camino, con aciertos y errores, con triunfos y fracasos, con alegrías y penas, soportando estoicamente lo que mis acciones me han traído a cambio. ¿Quejas? Ninguna, día a día le doy gracias a Dios por cada respiro, por cada latido de mi corazón, mismo que ha sido habitado por diferentes inquilinas y propietarias (no muchas), algunas lo trataron bien, otras no tan bien que digamos, tengo la extraña tendencia a ser monógamo y eso no siempre a sido entendido así. He tenido dos matrimonios hasta el momento de ésta misiva, de esos matrimonios tengo cuatro hijos en total, unos morochos Damian Alejandro Porras Gimenez y Halim Porras Gimenez del primero y Stefanie Antonietta Porras Kunaizeh y Carlos Jabour Porras Kunaizeh (mi cabù) del segundo, para ellos todo mi amor y las mas bellas bendiciones para sus vidas.
Tengo otras dos hermanas Paternas, Tiuyary Elba Margarita Porras Reyes y Yubinay Carmen Cecilia Porras Reyes, a las que amo. Por respeto a las vidas privadas de mis tres hermanas sólo mencionarè sus nombres.
Tengo una Madrastra, se llama Nelly Reyes Jaimes de Porras, quien se ha ganado mi amor y respeto.
Ahora me encuentro ya en lo que se me ocurre denominar "la segunda mitad de mi vida" transitando un nuevo camino, viviendo nuevas experiencias, forjando un futuro de paz y tranquilidad, un futuro con deseos de futuro, un futuro con ganas de vivir, aunque eso signifique luchar ahora, luchar ahora para forjar la paz del futuro.
¿Cansado? Si, cansado de luchar, de esperar, de creer, de confiar, de dar, de seleccionar mal, de apoyar, de aguantar, etc. ¿Que hacer entonces? Seguir hasta que Dios quiera.
Hace unos días vi una página que decía "¿que esperas de la vida?" y traté de responder esa pregunta, realmente traté pero no pude responderla. Después de pensar un rato me di cuenta que realmente no espero nada. Todo lo que quiero ahora de ésta vida no lo estoy esperando de ella... estoy luchando por lo que quiero. Hablando sólo de las cosas en las que puedo intervenir, quiero paz, amor, un abrazo sincero y un beso al llegar del trabajo, ser deseado por mi pareja para tener buena y frecuente actividad, rica comida, paseos con lindos paisajes, platica suficiente, tiempo de calidad con mis hijos, un sitio cómodo para vivir, un hogar bendecido por Dios, sentirme útil hasta el fin de mis días, entre otras cosas.